Hoy publica Cinco Días una entrevista con José María Barreda en la que asegura que no se arrepiente del nivel de deuda de Castilla- La Mancha… cuanto menos, curioso. Lo justifica diciendo que “la economía debe estar al servicio de las personas y no al revés”. Vamos, que aparentemente no está nada preocupado puesto que, aunque la encuesta del CIS da como ganadora a Cospedal, él insiste en que las elecciones se ganan en las urnas. Pues sí, es necesario el voto material, efectivamente, pero la declaración de intenciones también es importante, no nos olvidemos.
Además, en la entrevista también trata el tema del aeropuerto de Ciudad Real y ante la pregunta de si acepta alguna responsabilidad en la situación en la que se encuentra y en la debacle de Caja Castilla-La Mancha y asegura que la razón del fracaso es que el aeropuerto es “de iniciativa privada y su puesta en funcionamiento coincidió con un mal momento del sector y después con la crisis económica global”. Pues bien, resulta que está demostrado que se concedieron créditos de muy alto riesgo a un grupo de empresarios amigos de Barreda, principales promotores de la sociedad Ciudad Real Aeropuertos S.L. De hecho, Barreda modificó la Ley del Suelo de Castilla-La Mancha para beneficiar a estos promotores y cambiando así la consideración jurídica tanto del terreno del aeropuerto como de los terrenos anexos.
Con todo esto, justifica que la crisis en la que se ve inmersa la región, con el déficit fiscal más alto de España (6,47%) es que “lo que comenzó siendo una crisis financiera internacional ha afectado a la economía real, también la de las administraciones públicas”.
Ahí lo dejamos.
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